viernes, 9 de agosto de 2013

CUESTION DE FE

Se sentó frente a ella  pero no pudo descolgarse la mochila que llevaba a sus espaldas. Le era imposible, se le había incrustado bajo la piel. El. peso de los años,el de sus fracasos y el de su obesidad la llenaban y hubiera sido más fácil pedirle que se sacara la vida y no su carga.
Tenía 35 años aunque sus ojos denotaban más del doble y la ausencia de felicidad era tanta que al mirarla trasmitía inmediatamente ganas de llorar.
En que puedo ayudarte preguntó la bruja ? sabiéndo de antemano que no habría ni pósima ni amuleto que lograra aliviar su dolor ni sus ganas de comer y destruirse.
No lo sé contestó, no me reconosco y esta que soy ya no quiere nada. La odio y me odio por odiarla, solo
se que quisiera que me abandonara, pero se apoderó de mi hace mucho tiempo y  crece cada  día haciendo de mi un monstruo que ya no reconozco frente al espejo.
Sacó de la billetera cuatro fotos: la primera sacada 19 años atrás, La bruja miró la foto y trató de reconocer en ella a la misma mujer y le fué imposible... una joven felíz y NORMAL que miraba desde allí pensando que podía conquistar el mundo... Sacó la segunda y la bruja la reconoció, más mujer, más redonda pero hermosa, maquillada para la batalla y camuflada para que no se notara que se estaba inflando y dejando atrás la que quería ser. Y así llegó a la dolorosa actualidad, ella y sus fotos.
Las dos se miraron y la adivina comenzó a soyosar en silencio.... es cuestión de voluntad dijo, es cuestión de fé, de que quieras querer.
La mujer se levantó, tomó sus fotos, sus dolores y sus esperanzas rotas y se fue de alli sin mirar atrás.
La bruja se quedó en silencio sabiendo que había fracasado y que la sentenciaba a una muerte lenta y sabrosa entre postres y bula.
Esa noche mientras la mujer gorda se saciaba ella rechazó su cena y le pidió perdón a sus santos por dejarla partir sin siquiera darle un abrazo y decirle que era la mujer más hermosa que se había sentado frente a ella.

jueves, 8 de agosto de 2013

MI MEDIA NARANJA

A quien se le habrá ocurrido elegir una fruta ácida para definir al ser que queremos al lado para compartir
nuestra vida? Me imagino que esa debe ser la razón primera que hace que las relaciones de pareja sean  tan tortuosas, rebuscadas y agotadoras.
Podrían haberlas identificado con un huevo.... así uno sería la clara y otro la yema y juntos al batirse harían maravillosas recetas. Pero no, la unidad es una fruta acida... esa que según la temporada se torna jugosa y 
dulce o seca e insípida
Y así es que cuando se quiere acordar uno de los dos prefiere "ensalada" y comienzan a aparecer los terceros con sabores nuevos y frescos colores que hacen que terminemos sin nuestra mitad...esa que elegimos para ser unidad sin darnos cuenta que aunque en ello se nos va la vida rogamos que se nos una y por siempre nos llene el alma de VITAMINA C